hoy cumplimos 2oo niños



 
 
Estamos de cumpleniños, hoy podemos decir que hemos cumplido 2oo niños¡¡¡ o más bien, hemos cumplido con 2oo niños. Desde que comenzamos, hace muy poquito, a nuestros talleres han asistido ya 2oo niños, como 2oo soles¡¡¡ Ellos: 2oo mentes con 2oo personalidades, nosotras: 2oo ilusiones, y 2oo retos...

...que cumplamos muchos maaaaaaaaaaaaas...

 

érase una vez que se era un lobo que no tenía abuela...

  
 
 
Érase una vez que se era un lobo que no tenía abuela,
presumido y presuntuoso tenía el pelo muy sedoso.

Caperucita tenía cara de flor, las flores no tenían cara
este cuento es una pasada¡¡¡

Cincuenta niños pintaban cincuenta bosques
y cada uno con distintos colores.
Con lápiz y pegatinas la fiesta está servida.

La casa se convertía en lobo, el lobo en casa,
de las narices salían bigotes y los ojos eran redondotes,
lobito, lobito, ¿tus orejas son escuadras o cartabones?

Cinco lobitos tiene la loba, cinco deditos y una flor roja.

Un pájaro, ¿un pato? y otra vez un árbol,
copas y copetes, colores y coloretes
caperucita, ¿me quieres o no me quieres?



Termina el cuento con mucha jeta,
jo¡¡ el lobo se ha metido en tu carpeta¡¡¡

 

el detalle al detalle

 
 
 
composición
+
color
+
sabor
+
tesón

=

ingredientes ideales para cualquier ocasión
 
 

candy bar futbolero


El reto: conseguir plasmar la pasión futbolera de un niño llamado Pablo en su Primera Comunión... reto superado¡¡¡ No sólo le emocionamos a él sino que nos emocionamos nosotras, más bien nos entusiasmamos, no por el fútbol que no es precisamente nuestra mayor inspiración, esa es la verdad, pero esta versión comestible de un campo de fútbol nos salió redonda, tan redonda tan redonda como los balones de chocolate que inundaron el césped (alguno no tocó el suelo, voló directamente a la boca de alguien...)

El resultado: buffet de chuches, galletas, marshmallows, muffins, lollipops...único, original y para todos los públicos, juzguen ustedes mismos...

 
 
 

¿qué es más blandito que un osito?


Un pequeño ejército de osos coronaron la cima de la montaña de nubes, al subir notaron que era todavía más blandita que ellos y esto les hizo mucha gracia :) se tumbaron boca arriba y esperaron su bonito destino: hacer felíz a otro ejército de niños¡¡¡

Nunca un escudo supo mejor, ni se sintieron más sus colores, sobre todo en la barriguita¡¡¡, si no que se lo pregunten a todos los amigos que Pablo invitó a su Comunión.